Comunidad rarámuri de Bosques de San Elías Repechique exige frenar la tala en su territorio
Creel, Chihuahua — 11 de abril de 2025 — Integrantes de la comunidad indígena rarámuri de Bosques de San Elías Repechique realizaron este viernes una protesta pacífica en las inmediaciones del Aeropuerto de Creel, para exigir el cese inmediato del aprovechamiento forestal en su territorio, el cual aseguran se realiza de forma ilegal pese a contar con resoluciones judiciales que prohíben dichas actividades.
Respaldados por sentencias emitidas desde 2018 —y ratificadas de forma definitiva en 2024—, la comunidad denunció públicamente a dependencias como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) y la Mesa Interinstitucional de Tala Ilegal del Gobierno del Estado, por omisión y falta de acciones ante la continua extracción de madera.
Los pobladores señalaron que, desde febrero de este año, detectaron actividad de tala a tan solo 800 metros de la confluencia de los arroyos Gomego y Guicisaguachi, en un predio conocido como El Rinconcito Lejano. En el lugar observaron bolillos de pino listos para ser transportados, lo que confirmaría que la explotación forestal continúa pese a las prohibiciones legales vigentes.
Cabe destacar que, según la sentencia del Juzgado Décimo de Distrito en el juicio de amparo indirecto 642/2018, cualquier permiso de aprovechamiento forestal en la zona debe contar previamente con una consulta libre, previa e informada a la comunidad indígena, la cual no ha sido realizada.
Además de las denuncias ante PROFEPA y SEMARNAT, la comunidad también notificó a la Mesa Interinstitucional, sin que hasta la fecha se haya realizado inspección alguna ni acciones concretas para frenar la tala. Incluso, según testigos, las personas encargadas de marcar y cortar los árboles están protegidas por sujetos armados.
Los manifestantes exigieron el cumplimiento inmediato de la ley, el respeto a su territorio ancestral y la intervención urgente de las autoridades competentes para detener el daño ambiental en la región, agravado por los incendios forestales que también afectan la zona.
“Estamos aquí porque tenemos derecho a defender nuestro bosque. Ya hay sentencias, ya hay leyes, lo que falta es voluntad para hacerlas cumplir”, expresaron algunos de los participantes en la manifestación.
