Chihuahua.– Un contingente de 600 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) llegó al estado para integrarse a los operativos de seguridad que se intensificaron en la región de Parral, informó el fiscal general César Jáuregui Moreno.

El arribo de los militares se produce tras el fin de semana violento que dejó ocho personas sin vida en hechos ligados a rivalidades entre grupos criminales. Según el fiscal, el personal castrense ya fue distribuido en distintos puntos del sur del estado, donde autoridades federales, estatales y municipales trabajan bajo un esquema conjunto de intervención.

La estrategia fue acordada durante una reunión realizada el martes en Parral, encabezada por mandos de seguridad y la gobernadora, con el objetivo de contener la disputa entre células delictivas que operan principalmente en Jiménez y Parral.

Jáuregui señaló que la reciente ola de violencia no es un hecho aislado, sino la continuación de un conflicto originado hace alrededor de año y medio, cuando un ataque previo dejó varias víctimas. Incluso, precisó que uno de los involucrados en los hechos recientes ya contaba con una orden de aprehensión.

Las autoridades destacaron que el refuerzo militar busca estabilizar la región y reducir el riesgo para la población mientras avanzan las investigaciones y se ejecutan acciones operativas contra los grupos responsables.