No vamos a permitir que se lleven el agua de Chihuahua: Mario Mata
El presidente ejecutivo de la Junta Central de Agua y Saneamiento, Mario Mata Carrasco expresó que el gobierno no permitirá que nadie se lleve el agua de Chihuahua, debido a que pertenece a los productores y ciudadanos chihuahuenses.
Cabe señalar que, hace unos días se creó en Reynosa, Tamaulipas un grupo interdisciplinario para exigir la correcta distribución del agua del Río Bravo con lo cual, se buscará la apertura de las presas de Chihuahua para destinar un porcentaje de sus aguas a dicha entidad federativas.
La mesa interdisciplinaria tuvo la participación de diputados federales y locales, alcaldes de la región fronteriza de Tamaulipas, organismos operadores del agua, representantes de los Distritos de Riego, el delegado de Gobernación en la entidad, así como representantes de la CILA y CONAGUA.
Ante esto, Mario Mata dijo que no han tenido ningún acercamiento con autoridades federales y estatales de aquella región para tratar el tema, sin embargo, aseguró que la postura será en defensa del vital líquido.
“Aquí somos muchas personas que vamos a defender el agua con la Ley en la mano hasta donde tope, esto lo haremos encabezados por una líder como lo es la gobernadora Maru Campos”, subrayó el funcionario.
Aseguró que el interés es informar primeramente a toda la ciudadanía y usuarios del agua, así como también sensibilizar a las autoridades para promover diálogos constructivos entre el gobierno federal y los cinco estados y municipios que formamos parte de la Cuenca del Río Bravo y su Consejo: Coahuila (32 municipios), Durango (3 municipios), Chihuahua (55 municipios), Nuevo León (44 municipios) y Tamaulipas (10 municipios) para atender juntos el reto que representa la sustentabilidad hídrica en la legalidad y gobernanza.
“Estamos muy preocupados por las condiciones de sequía que se ha vivido en los últimos años en toda la región fronteriza entre el norte de México y el sur de Estados Unidos que es debido principalmente al cambio climático y la sequía: altas temperaturas, mayor evaporación, espaciamiento de precipitaciones pluviales que disminuyen la infiltración de los acuíferos y los escurrimientos por los afluentes de la cuenca del Río Bravo y la del Río Colorado que hacen mucho más difícil el cumplimento de las entregas de agua que se estipularon en 1944 entre ambas naciones con el Tratado Internacional de Aguas”, reiteró.
Asimismo, dijo que el desarrollo social y económico de nuestras comunidades en la franja fronteriza, dependen del factor estratégico del agua para la calidad de vida de sus habitantes y en todas las actividades productivas de la región: La agricultura, ganadería, agroindustria, industria, servicios y comercio, requieren del agua como insumo prioritario y pueden realizarse en armonía con el ambiente, en base la circularidad que puede darse en base a las tecnologías de mayor rendimiento productivo, tratamiento y reúso de las aguas tratadas
Cabe hacer mención que, de acuerdo al Tratado de 1944, Estados Unidos debe entregar a México 1,850 millones de metros cúbicos cada año por el Río Colorado.
Por otra parte, México debe entregar a Estados Unidos la tercera parte del agua que llegue a la corriente principal del Río Bravo y que no será menor a 431.7 millones de metros cúbicos cada año en promedio, en ciclos de cinco años consecutivos y en conjunto por los 6 afluentes: el Río Conchos en Chihuahua y en Coahuila los ríos San Diego, San Rodrigo, Escondido y Salado, así como el arroyo Las Vacas. Las 2/3 eras partes de lo que escurre por el Río Bravo son propiedad de México, sin definir a que entidades federativas corresponde.
Aunque la obligación es quinquenal se revisa la tendencia del cumplimiento de forma constante en base a la proporción del ciclo en curso. El Río Conchos ha estado aportando más del 77% de las entregas en el actual Ciclo 36, información oficial de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) con quienes se mantiene comunicación constante entre investigadores, academia y autoridades, como fue el encuentro de esta semana entre la SDR, JCAS para abordar este asunto relevante del manejo del agua.
Ante esto, los representantes del campo y funcionarios expresaron su inconformidad y dijeron que no permitirán que se lleven el agua que le corresponde al estado grande.





