En un reciente pronóstico, José Domingo Figueroa Palacios, presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), ha estimado un crecimiento económico del 1.2% en México para 2023. Sin embargo, este crecimiento se encuentra muy por debajo de su potencial, que se estima en torno al 2%.
El panorama para el próximo año no es alentador, ya que existen fuertes riesgos que podrían afectar negativamente el crecimiento económico. Una posible recesión en Estados Unidos, una inflación más elevada de lo previsto y una política monetaria restrictiva tanto en México como en Estados Unidos son factores que podrían disminuir aún más el crecimiento previsto para 2023.
Es importante destacar que el crecimiento económico de un país es un indicador clave de su desarrollo y progreso, por lo que una tasa tan por debajo de su potencial es preocupante. Se requiere una acción rápida y efectiva por parte del gobierno para mejorar la situación económica y garantizar un futuro próspero para la población mexicana.