Fiscalía de EE.UU. mantiene abierta la posibilidad de pena de muerte para Caro Quintero
El caso de Caro Quintero es emblemático para la DEA y el sistema judicial estadounidense. Su implicación en el asesinato de Camarena provocó una crisis diplomática entre México y EE.UU. en los años 80 y dio origen a la Operación Leyenda, la mayor investigación en la historia de la agencia antidrogas. Tras su liberación en 2013 por un fallo judicial en México, permaneció prófugo casi una década hasta su captura en 2022 y posterior entrega a EE.UU. en febrero de 2025, junto con otros 28 capos del narcotráfico
En una audiencia celebrada este 25 de junio en Nueva York, la Fiscalía estadounidense confirmó que aún evalúa solicitar la pena capital contra Rafael Caro Quintero, acusado del secuestro, tortura y asesinato del agente de la DEA Enrique “Kiki” Camarena. La decisión final se conocerá el 18 de septiembre.
La Corte del Distrito Este de Nueva York fue escenario de una audiencia clave en el proceso judicial contra Rafael Caro Quintero, conocido como el “Narco de Narcos”. Aunque la Fiscalía no formalizó la solicitud de pena de muerte, la fiscal Saritha Komatireddy aseguró que la opción “sigue sobre la mesa” y que se tomará una decisión definitiva en la próxima audiencia.
Durante la sesión, que duró apenas 20 minutos, la Fiscalía presentó como parte de su arsenal probatorio grabaciones inéditas del interrogatorio y tortura del agente de la DEA Enrique Camarena, asesinado en 1985. Estas pruebas, consideradas “extremadamente sensibles”, se suman a más de 30 intervenciones telefónicas y documentos forenses que refuerzan la acusación.
• Caro Quintero enfrenta cargos por dirigir una empresa criminal continuada, conspiración para asesinato, distribución internacional de narcóticos y uso ilegal de armas de fuego.
• La defensa, liderada por la abogada Elizabeth Macedonio, prepara un “paquete de mitigación” que incluye argumentos sobre la antigüedad del crimen y la naturaleza no convencional de su entrega a EE.UU..
• El acusado permanece recluido en el Centro Metropolitano de Detención de Brooklyn bajo medidas especiales: aislamiento de 23 horas diarias y comunicación restringida.
La audiencia del 25 de junio no resolvió el destino judicial de Caro Quintero, pero sí dejó claro que el caso sigue siendo prioritario para las autoridades estadounidenses. La próxima cita, el 18 de septiembre, podría marcar un punto de inflexión en uno de los juicios más simbólicos del combate al narcotráfico.