Rocha denuncia advertencia criminal tras intento de secuestro a su nieta: “Quieren frenar la captura de Iván Archivaldo”
El mensaje detrás de las balas: Rocha vincula ataque a su nieta con la cacería de Iván Archivaldo
Culiacán, Sinaloa | 25 de septiembre de 2025
El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, enfrenta una de las semanas más tensas de su mandato. El intento de secuestro de su nieta en una de las principales vialidades de Culiacán, ocurrido el martes, ha sido interpretado por su equipo como una advertencia directa de “Los Chapitos”, en medio de los operativos federales para capturar a Iván Archivaldo Guzmán. El hecho, que dejó a un escolta gravemente herido y el vehículo baleado, marca un punto de quiebre en la relación entre el crimen organizado y el poder político en el estado.
El ataque coincidió con la visita del subsecretario de Seguridad Pública federal, Omar García Harfuch, a Sinaloa, en el marco de una estrategia conjunta entre la Secretaría de Marina y autoridades estadounidenses para capturar a Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán y líder visible de la facción de “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa.
Fuentes federales confirmaron que en las últimas semanas se han intensificado los acuerdos bilaterales entre México y Estados Unidos, particularmente con la DEA y el Departamento de Justicia, para concretar la extradición de Guzmán Salazar, considerado uno de los capos más violentos y evasivos del continente.
El ataque y sus implicaciones:
El vehículo en el que viajaba la nieta del gobernador recibió al menos 15 impactos de bala. Uno de los escoltas resultó gravemente herido y fue trasladado al Hospital General de Culiacán. Rocha no negó el intento de secuestro, lo que fue interpretado como un reconocimiento tácito del mensaje detrás del ataque.
En paralelo, se registraron balaceras en distintos puntos de la ciudad y la muerte de un funcionario estatal vinculado a la compra de medicamentos, lo que elevó la tensión en el gabinete de seguridad.
Rumores y represalias:
Dentro del equipo de seguridad del gobernador, especialmente entre oficiales de la Sedena, circuló el rumor de que el autor del ataque habría sido localizado y ejecutado por fuerzas no identificadas. Aunque no hay confirmación oficial, el silencio institucional sobre el tema ha alimentado las especulaciones.
Reacciones políticas y cálculo electoral:
El respaldo a Rocha fue inmediato, incluso desde sectores opositores. Gerardo Vargas Landeros, exalcalde de Ahome y adversario político del gobernador, publicó un mensaje de solidaridad en redes sociales. En contraste, la oposición institucional ha guardado silencio, mientras medios afines al mandatario reclaman empatía ante lo que consideran un intento de intimidación política.
En el plano electoral, el ataque podría reconfigurar el discurso de seguridad en Sinaloa. Rocha, quien ha sido señalado por mantener una postura ambigua frente al crimen organizado, podría capitalizar el incidente como prueba de su independencia frente a los cárteles, aunque también enfrenta cuestionamientos por la efectividad de su estrategia de pacificación.
La narrativa oficialista:
A pesar del caos, el gobierno federal mantiene su discurso de mejora en seguridad. Esta semana, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, reiteró que “los indicadores muestran avances”. Sin embargo, los hechos en Culiacán contradicen esa narrativa y exponen una realidad paralela que se impone con violencia.
El intento de secuestro a la nieta de Rubén Rocha no solo sacudió a Sinaloa, sino que reveló las tensiones entre el poder político y el crimen organizado en un momento clave para la cooperación bilateral en seguridad. El mensaje detrás del ataque parece claro: frenar la captura de Iván Archivaldo Guzmán. Pero la respuesta del Estado aún está por definirse.