Hasta en la naturaleza se pueden dar relaciones de afinidad o de un acuerdo mutuo para poder mantenerse sanos, y este es el caso que tiene la acacia cornigera con las hormigas.
La mayoría de las plantas para mantenerse sanas y salvo de algunos insectos, requieren producir una sustancia para para su protección y mantenerlas alejadas. Sin embargo, para la acacia cornigera, prefiere mantener cerca a las hormigas.
I. Características de la Acacia cornigera
Es conocida como el árbol del cuerno, cuerno de toro o cucharilla. Puede alcanzar hasta los diez metros de altura, posee espinas de color café o amarillo, que son grandes y aparte ahuecadas por dentro. Es una planta nativa del sur de México y se localiza también en países de Centroamérica.
II. Su relación con las hormigas
Estas hormigas, actúan como mecanismo de defensa, cuidan del árbol y lo protegen de otros insectos o animales que puedan hacerle daño. Ellas viven en las espinas huecas del árbol, y se alimentan de unos pequeños glóbulos ricos en glucógeno que son secretados por el ápice de los foliolos.
III. Su polinización
También las flores de esta planta atraviesan por un proceso de polinización, solo que es un poco diferente a lo que habitualmente pudiéramos conocer. Estas flores no contienen la barrera resbalosa que produce cualquier otra para protegerse de las hormigas.
La acacia cornigera producen una dosis adicional de néctar que no se encuentra dentro de las flores, esto hace que se vuelva atractivo para las hormigas y permite que se puedan acercar los agentes polinizadores, sin que sean atacados por ellas. Cuando las hormigas empiezan a querer tomar más néctar de la flor, estas segregarán una sustancia química que hará que los pequeños insectos no se acerquen. Cuando el polen ya ha sido retirado por los polinizadores, entonces las flores se vuelven menos repelentes. Es ahí cuando las hormigas regresan a casa y vuelven a proteger a la planta de otros insectos y otros animales.
