La flor de azafrán es una de las especias más caras y cotizadas que existen en el mundo, su extracción solo se puede realizar de forma manual, es lenta su producción y la cantidad de materia prima que se recolecta por planta es sumamente baja.

La planta de azafrán recibe el nombre científico de Crocus sativus, y pertenece al grupo de plantas bulbosas llamadas iridáceas. Su floración se da entre los meses de octubre y noviembre, estas contienen los estigmas, que es la parte del pistilo que se cosecha y se seca para obtener la especia que da sabor a muchos de nuestros platillos y que los aromatiza.

A pesar de que es una especia muy apreciada en la gastronomía nacional e internacional, se encuentra en grave peligro de extinción, y esto por diversas razones, entre ellas, el cambio climático y hasta los conflictos políticos han venido influyendo en su producción. Si quieres poner tu granito de arena y tratar de recuperar esta planta, hoy te decimos cómo cultivar tu propio azafrán en casa y puedas aprovechar la especia en tus platillos.

I. Forma de cultivar azafrán en casa

1. El azafrán se cultiva por medio de bulbos. Estos se podrán conseguir en un invernadero o en tiendas especializadas en este tipo de plantas.
2. Una vez que hayas conseguido los bulbos, es momento de plantar. Lo ideal es hacerlo a finales del invierno y de la primavera. Procura siempre abonar tu sustrato antes de que hagas la plantación. Debes usar una maceta grande tipo rectángulo, siembres los bulbos con cierta profundidad y con 20 centímetros de distancia entre cada uno.
3. Vigila que la maceta tenga muy buen drenaje, con la finalidad de que no llegue almacenar agua en el fondo, ya que la humedad puede afectar al bulbo y en general a la planta.

II. Cuidados que debes tener con esta planta

1. El azafrán no requiere de mucha agua, pero lo ideal es alternar los días de riego. En verano es posible que tengas que aumentar el riego y en invierno escasea su humedad.
2. Una vez que la planta tenga ya su floración, disminuye el riego al mínimo para que no afecte su raíz.
3. Cuando llegue la temporada de frío, deberás tener más cuidado con ella, procura protegerla de las bajas temperaturas, por lo que utiliza un plástico para taparla, si es que la tienes en jardín, si la tienes en maceta arrópala dentro de tu casa.
4. Al momento que el azafrán florezca, puedes retirar el pistilo de la flor de manera delicada; estas 3 hebras rojas, son las que servirán como condimento para tus platillos.
5. Guarda los pistilos en un envase a temperatura ambiente. Debido a la intensidad de su sabor, sólo necesitarás utilizar un poquito para condimentar los alimentos.
6. Cuando el azafrán se seque o se boten sus hojas, será el momento de vaciar la maceta, es decir, retirar los bulbos y repetir el proceso.

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