Desde el 2002, la maison de Chanel, a través de su director creativo, Karl Lagerfeld, ha implementado este tipo de colecciones, el Chanel’s Métiers d’Art, que significa literalmente “oficios de arte”, la cual en esta ocasión se llevó a cabo en Manchester. La finalidad de estes evento, es preservar el patrimonio artístico, técnico y cultural del savoir-faire francés.

Los desfiles de las colecciones Métiers d’art de Chanel, se presenta una vez al año y se ha ido consolidado como un evento imperdible en el calendario de la moda y para los aficionados de esta, la cual, a capturando la esencia única de la Alta Costura. En esta ocasión, se materializaron 72 looks con toques contemporáneos y juveniles.

Se destacaron trajes del clásico tejido tweed y vestidos de punto, la elegancia clásica siempre presente en sus desfiles. En esta ocasión, la maison se aventuró y exploro otros territorios, pues también mostro elementos como la logomanía, estampados llamativos o combinaciones que se considerarían atrevidas.

No solo se introdujo en los cambios antes mencionados, sino que también en la textura, pues mostro tejidos tradicionales hasta aplicaciones más extravagantes, como detalles florales en relieve y adornos de plumas.

Los tonos que se vieron en pasarela son colores suaves y clásicos (como el salmón y el marrón del tweed), pero también colores vibrantes y llamativos, tales como el fucsia y el azul eléctrico o el amarillo.

Tratándose de los accesorios, no se puede olvidar los favoritos de la casa, en los cuales encontraremos los zapatos tipo bailarinas, las perlas, así como las cadenas de oro.