La Protea Cynaroides, también es conocida por el nombre de “King Protea” o “Rey Protea”. Es considerado como un arbusto tropical, es muy apreciada por su toque decorativo, además de ser una especie que probablemente sea la más llamativa y espectacular de todas las especies de Protea. Es originaria de Ciudad del Cabo en Sudáfrica y poseedora del título de la Flor Nacional. Por su alta capacidad de adaptación, se puede cultivar tanto en maceta como en jardín, lo anterior si tiene un clima adecuado.



I. Características que posea la Protea Cynaroides

Los arbustos maduros pueden miden aproximadamente un metro de altura, pero pueden también puede variar según la localidad y el hábitat donde se encuentre.

Es una planta que posee hoja perenne, de un color verdes, largas y ovaladas, las cuales nacen de tallos de color verde rojizo. Otra de sus características es que puede absorber humedad a través de sus hojas. Las plantas grandes pueden producir de 6 a 10 capullos en una sola temporada.

Su flor puede llegar a medir 30 centímetros de ancho. Tiene la apariencia de una copa, cuenta con pétalos rígidos, puntiagudos y estrechos. La mitad inferior de sus pétalos comienza de color crema o amarillo, mismo que se va volviendo rosa brillante o rojo aterciopelado. Son hermafroditas, es decir, tienen órganos masculinos como femeninos.

La cabeza floral suele durar bastante tiempo abierta, por lo que puedes disfrutar de ella durante semanas seguidas, otro de los beneficios que tiene esta flor es que aún cortada tiene larga duración.

Dentro de estas Protea, existen 2 variantes en su habitad natural, una de ella puede florecer en los meses de invierno, de mayo a junio, mientras que la otra, lo realiza en los meses de verano, es decir, de enero a marzo.



II. Cuidados básicos que se le debe de dar

a) Ubicación y temperatura

Son plantas de temperaturas cálidas, por lo que necesitarán que se encuentren entre los 20 ºC y los 25 ºC. No soportan mucho el frío y menos las heladas, por lo que en la medida que puedas en esta temporada protégelas.

b) Luz

Plántala en una zona soleada (requiere de luz directa de sol) y donde circule bien el aire, no te preocupes por el viento porque les encantan las zonas ventosas.

c) Sustrato

Puede ser cultivada en maceta o en jardín, siempre y cuando la atmósfera sea seca y tenga un suelo con un muy buen drenaje. Le gustan los suelos arenosos ácidos, es muy sensibles a los nitratos y fosfatos del suelo, lo que pueden resultar tóxicos para ella, incluso en niveles moderados.

Mezclas de 25% a 50% de turba y el resto de poliestireno o perlita han dado buenos resultados.

d) Riego

Requiere de un muy buen drenaje, ya que requiere de una humedad alta para poder absorber correctamente los nutrientes, solo recuerda no encharcarla para que no se pudran las raíces.

A lo largo de los dos primeros años después de la siembra es esencial que la riegues profundamente una vez por semana. Una vez ya se haya establecido, son unas plantas que toleran bastante bien los períodos de sequía.

e) Fertilización

Utiliza un producto que no contenga fósforo ni nitratos.

f) Poda

Para que crezcan sanas y fuertes, poda la punta de las plantas jóvenes tras los primeros seis meses o un año después de haberlas sembrado. Habitualmente esto será en primavera hasta finales del verano.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *