A esta planta se le conoce como Euphorbia milii y es conocida como, corona de cristo o planta corona de espinas, esto debido a la leyenda que cuenta que esta planta fue la que se utilizó para confeccionar la corona de espinas. Su lugar de origen es la isla de Madagascar, en África. Es considerada como arbusto y puede medir hasta 1 metro de altura, se suele destacar por sus flores de color rojo o rosado.
Se considera como una suculenta muy resistente, puede llegar a florecer durante todo el año, siempre y cuando tenga el clima y condiciones adecuadas.
Los cuidados que se necesita tener para esta suculenta son:
a. Clima
Esta planta no soporta temperaturas extremas, ni inviernos muy fríos ni veranos muy calurosos y secos. El clima perfecto para ella es, de una temperatura de entre 20ºC y los 35ºC. En invierno no se debe exponer a una temperatura por debajo de los 5°C.
b. Ubicación
La planta corona de cristo es de sol, por lo que tendrás que buscarle una ubicación lo más soleada posible.
Puede tenerla en el interior de tu casa, solo recuerda ponerla en un lugar donde reciba de manera directa los rayos del sol.
c. Sustrato
La corona de Cristo no es exigente con su sustrato, pero al igual que todas las plantas, está necesitara de un buen drenaje, es decir, que no retenga el agua ni en la maceta ni en el jardín.
Si la tienes en maceta, puedes prepararle una mezcla de turba y arena de río o fibra de coco, esto ayudará a tener una mejor capacidad de drenaje. También puedes ponerle un poco de vermiculita y perlita, esto ayudará para su floración.
d. Riego
Es una planta que puede soportar grandes temporadas sin riego. Como recomendación, solo riega el sustrato cuando se encuentre seco por completo y recuerda no encharcarla, ya que esto la dañaría por completo. Como toda planta, en la época de invierno, deberás de espacia sus riegos aún más de lo habitual.
e. Abono
No requiere de abono, aunque puedes proporcionarle una pequeña dosis para ayudarle con la floración. Utilizar fertilizante que sea específico para suculentas y que este bien diluido en agua (cuida que no contenga boro).
No apliques demasiado, es mejor pecar de carencia que de exceso.
