El cyclamen, más conocido como “Ciclamen”, ‘Violeta de Persia’ o ‘Violetas de los Alpes’ En algunas partes del mundo también se le conoce como artánita y pan de puerco. Es una planta de tubérculo que pertenece a la familia de las primuláceas y suele crecer a la sombra de los árboles durante el invierno. Tiene un aspecto delicado, pero que su apariencia no te engañe, pues en realidad es muy resistente.
Es una planta que proviene de la zona mediterránea, en donde los inviernos son bastante intensos y los veranos muy cálidos. Por lo tanto, se ha adaptado perfectamente bien a los inviernos frescos e intensos, es ahí cuando veremos crecer sus flores. El exceso de calor y sol pueden ser mortales para ella.
Durante el verano, sus hojas se marchitan y el bulbo queda latente en el suelo preparándose para el siguiente otoño.
Otra de sus características son sus flores, pues constan de pétalos grandes. Las podemos encontrar en diversos colores, tales como rosa, morado, naranja o blanco. Tiene además unas hojas de color verde intenso y su raíz es un tubérculo negro.
Existen diversas variedades de ciclamen en función del tamaño que alcanzan y aquí te dejamos algunas de ellas:
1. El ciclamen mini: esta suele tener flores muy pequeñas. Puedes cultivarlas en exterior, ya que aguanta las heladas y las bajas temperaturas. En interior es utiliza como complemento decorativo, puedes ubicarla en espacios pequeños.
2. El ciclamen mediano: es una especie que llega a florecer mucho. La mejor opción para su cultivo son las jardineras (solo evita que las heladas le caigan directamente). Son perfectos para tenerlas en terrazas o balcones.
3. El ciclamen grande: la puede utilizar como planta de interior en lugares que tengan mucha luz, y en exterior exclusivamente en zonas de clima mediterráneo.
I. Cuidados que debes de darle al ciclamen
a) Luz
Procura ubicarlas en lugares muy luminoso, evitando que estén en zonas de calor de la casa, ya que se adapta mejor en lugares frescos. El exceso de calor dala su ciclo y claro que reducirá su vida ornamental. Lo ideal es colocarlas junto a una ventana para que reciba mucha luz, pero nunca sol directo.
b) Temperatura
No es recomendable que se cultive con temperaturas superiores a los 16ºC, pues su floración comenzará a marchitarse rápidamente y la raíz entrará en periodo de descanso. Para que el ciclamen dure muchos meses florecida, evita ponerlo en el lugar caluroso dentro de hogar. Al atardecer, puedes llevarla al exterior, ya sea al pie de una ventana abierta o en un balcón. Durará más si lo dejas en exterior al resguardo y solo lo metes en casa en ocasiones especiales.
c) Riego
Esta planta posee un tubérculo, similar al de la papa, pero más pequeño, por lo que es necesario que se mantenga seco. Su riego debe de ser moderado, ya que un exceso puede provocar podredumbres y suponer la muerte irreversible de la planta. Mantén el sustrato siempre húmedo, solo evita los excedentes de agua del platillo tras cada riego.
El mejor método para regar estas plantas es el de inmersión. Solo debes tomar la planta con su maceta y la introduces en un recipiente con agua, así no regaras directamente la tierra del ciclamen. La planta lo que hará es absorber desde la base lo que requiera de agua. La dejas así entre 10 y 15 minutos. Es importante que el agua esté entre templada.
d) Plantación
Para la plantación en jardineras, será necesario utilizar un sustrato nuevo. Recuerda que, para mantenerlas en óptimas condiciones, requieren que no se rieguen en exceso. Puedes conseguir un sustrato hidrocontrol, esto ayudará a mantener el sustrato húmedo durante mucho tiempo. De hecho, mantiene hasta un 40% más de agua disponible para las plantas.
