Por Jeanette Trillo

Fue un 8 de julio del año 1999 que un grupo de espectadores abandonaron una sala de cine independiente dejando atrás un poco de su alma, esto luego de presenciar el estreno del terrorífico filme “El Proyecto de la Bruja de Blair” de los directores Eduardo Sanchez y Daniel Myrick, marcando una nueva pauta para la creación de películas de terror en primera persona.

Los hechos de esta historia se desenvuelven alrededor de tres jóvenes que decidieron entrar al bosque acompañados de cámaras para captar los sucesos extraños que se dicen ocurren en el lugar, sin embargo, estos están muy lejos de comprender que su destino fue sellado al momento de poner los pies dentro del territorio de un ser tenebroso y del cual no volverán a salir.

La película afirma que luego de entrar al, llamado por los locales, bosque de la bruja de Blair, lo único que se encontró de estos jóvenes fue su equipo de filmación el cual albergaba en varias grabaciones el terrible final que sufrieron a manos de la bruja.

Son estas mismas grabaciones las que se presentan al espectador como prueba de los hechos y de lo que queda a cuenta de cada persona tomar como cuento o realidad.

El filme recaudo un total de 248 millones de dólares y estamos seguros que millones de sustos más.

Luego de ver el éxito de este estilo de filmación surgieron en los próximos años películas que buscaban replicar el terror causado por este filme, tales como Rec, la franquicia de Actividad Paranormal, Murder Death Koreatown y Megan is Missing, entre otros.