El mundo de la música es un terreno complicado en el que moverse, especialmente para aquellos artistas que han gozado de un éxito incontestable en el pasado y se ven obligados a enfrentarse a la difícil tarea de reinventarse.
En los últimos tiempos, hemos sido testigos de una tendencia en la que algunos de los artistas más importantes de la escena musical han optado por revisar sus catálogos, con la intención de insuflarles nuevos bríos y dotarlos de una mayor frescura. U2, uno de los grupos históricamente más importantes del pop rock mundial, ha sido uno de los últimos en sumarse a esta moda con su cuádruple álbum «Songs Of Surrender».
Sin embargo, según la crítica, este intento de revitalizar el catálogo de U2 ha resultado ser un fracaso absoluto. En lugar de aportar algo nuevo y emocionante, las versiones ralentizadas, semidesnudas o directamente acústicas de las canciones seleccionadas han dejado al descubierto todas las limitaciones y errores del proceso de revisión. El resultado final es un álbum que destaca por su falta de emoción y por el excesivo protagonismo de la interpretación de Bono, que se muestra aquí tremendamente autocomplaciente.
La selección de canciones también ha sido criticada duramente, ya que la tendencia a hacer versiones de la parte más hortera de las composiciones ha resultado en recreaciones innecesarias, artificiosas e incluso caricaturizadas. En algunos casos, las canciones han perdido por completo su dignidad, lo que ha provocado una sensación de banalidad en todo el álbum. Todo esto ha llevado a la crítica a calificar este proyecto como dolorosamente pretencioso, una muestra más de la deriva creativa en la que se encuentra sumido U2 desde hace tiempo.
Es evidente que el objetivo de este proyecto era recuperar la credibilidad artística del grupo, pero, según la crítica, el resultado ha sido exactamente el contrario. «Songs Of Surrender» no solo no ha conseguido insuflar nuevos bríos al catálogo de U2, sino que ha dejado al descubierto sus limitaciones y ha puesto de manifiesto la falta de ideas que parece atenazar al grupo. Para muchos, este álbum no solo es prescindible, sino que es un claro ejemplo de cómo la obsesión por revisar el pasado puede acabar por destruirlo.
«Songs Of Surrender» de U2 es un claro ejemplo de cómo las buenas intenciones no siempre son suficientes para conseguir un buen resultado, La revisión del catálogo de un grupo tan importante y tan venerado como U2 es una tarea difícil y complicada, que requiere de una gran dosis de talento y creatividad.
Lamentablemente, en este caso, el resultado ha sido un álbum carente de emoción, con versiones innecesarias y artificiosas que han dejado al descubierto las limitaciones del proceso de revisión.
Una oportunidad perdida para un grupo que, en lugar de reinventarse, parece estar perdiendo poco a poco su identidad creativa.