Kim Kardashian sorprendió al admitir que uno de sus momentos más polémicos fue también un error de estilo. La empresaria reconoció que haberse pintado el pelo de rubio para acompañar el icónico vestido de Marilyn Monroe en la Met Gala 2022 no fue la mejor decisión. En un nuevo episodio de The Kardashians, confesó que, con el tiempo, entendió que su característico cabello oscuro habría sido una elección más acertada.

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Durante la conversación, Kardashian recordó que varias personas le advirtieron que el rubio estilo Marilyn podría jugar en su contra, pero aun así decidió intentarlo. Admitió que, incluso años después, sigue “torturando” a su hairstylist Chris Appleton, pues ha retocado las fotos en incontables ocasiones para imaginar cómo habría lucido con un tono más oscuro, tipo Jackie O.

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El tema reavivó el recuerdo del polémico vestido que usó para la gala, una pieza histórica subastada en 4.8 millones de dólares y perteneciente a la colección de Ripley’s. Para entrar en él, debió bajar 7 kilos en tres semanas, siguiendo una estricta rutina y usando la prenda original solo por minutos antes de cambiarse a una réplica. Aunque muchos aplaudieron su homenaje a un ícono pop, otros criticaron el riesgo para una pieza histórica y el mensaje sobre dietas extremas.