El reciente videoclip de Katy Perry, titulado “Lifetimes”, ha sido objeto de una investigación por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de las Islas Baleares. Las autoridades han señalado que la filmación en Ibiza, donde se captaron imágenes en la playa y en un club, se llevó a cabo sin los permisos necesarios. Este hecho ha levantado preocupaciones sobre posibles daños ambientales, lo que ha motivado a las autoridades a iniciar un proceso de investigación preliminar.

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Capitol Records, el sello discográfico de Katy Perry, respondió rápidamente a estas acusaciones, asegurando que se les había garantizado que todos los permisos estaban en orden. Según la declaración de la discográfica, la empresa local encargada de la producción del video había solicitado el permiso específico a la Dirección General de Costas y Litoral el 22 de julio, recibiendo una aprobación verbal para proceder con la filmación el 27 de julio. A pesar de esto, el ministerio aclara que las acciones de Perry no constituyen un delito, sino una infracción administrativa.

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El videoclip, que ha acumulado cerca de 3 millones de reproducciones en YouTube desde su lanzamiento, ha generado tanto elogios como críticas. Mientras que los fanáticos de Perry disfrutan de su regreso a la escena musical, la polémica en torno a la falta de permisos en las Islas Baleares ha puesto en el centro de la atención la importancia de respetar las normativas ambientales durante la producción de contenido audiovisual.