El futuro de South Park, una de las comedias animadas más influyentes de la televisión, se tambalea tras la amenaza de una batalla legal entre sus creadores y Paramount. Trey Parker y Matt Stone, mentes detrás del irreverente programa, han acusado a la cadena de televisión de obstruir sus negociaciones con plataformas como Netflix y Warner Bros, interesadas en adquirir los derechos de transmisión de la serie.

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La disputa surgió luego de que venciera el contrato de licencia que permitía a Paramount distribuir South Park. Desde entonces, los creadores han intentado establecer nuevos acuerdos con otras empresas, pero aseguran que la cadena ha intervenido deliberadamente para modificar los términos de las ofertas, en beneficio propio y en perjuicio de los intereses de Parker y Stone.

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A través de una carta oficial emitida por Park Country —empresa propiedad de los autores—, se denunció que Jeff Shell, ejecutivo de RedBird Capital y posible presidente de Paramount tras su fusión con Skydance, habría solicitado condiciones desfavorables a las posibles compradoras. La compañía de los creadores advirtió que si tales prácticas continúan, se verán obligados a “proteger sus derechos” y tomar acciones legales.

Paramount, por su parte, respondió alegando que Skydance, en medio del proceso de adquisición, tiene facultad para aprobar contratos importantes. El conflicto se complica aún más porque ambas partes colaboran desde hace años en South Park Digital Studios, firma que actualmente controla los derechos de transmisión en streaming. A pesar de que a Paramount le restan dos años de contrato, busca renovarlo y llevar la serie a su plataforma Paramount+, intensificando así la tensión con los creadores.