La disputa legal entre Drake y Universal Music Group llegó a su fin luego de que una jueza federal desestimara la demanda interpuesta por el rapero. El conflicto surgió tras el lanzamiento de “Not Like Us”, de Kendrick Lamar, canción que encendió la rivalidad entre ambos artistas y que, además, alcanzó gran éxito al presentarse en el espectáculo del medio tiempo y recibir reconocimientos en los Premios Grammy.

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Drake había acusado a su propio sello discográfico, Universal Music Group, de difamación por permitir la difusión del tema de Lamar, al considerar que las letras afectaban su reputación. Sin embargo, la jueza de distrito Jeannette Vargas concluyó que la canción representa “una opinión no procesable”, es decir, no constituye una declaración difamatoria, ya que forma parte de una “batalla de rap”, donde se espera el uso de metáforas y retórica provocadora.

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Tras la resolución, Universal Music Group emitió un comunicado celebrando la decisión judicial, afirmando que la demanda “fue una afrenta a la expresión creativa de los artistas y nunca debió presentarse”. Mientras tanto, Drake no ha realizado declaraciones públicas sobre el fallo, y Kendrick Lamar tampoco ha reaccionado a la noticia, dejando en suspenso el siguiente capítulo de su conocida rivalidad musical.