La actriz Lea Michele compartió recientemente cómo la muerte de Cory Monteith, su pareja y compañero en la serie Glee, impactó profundamente su vida personal y profesional. En una conversación abierta durante el pódcast Therapuss con Jake Shane, Michele reveló que su vínculo con el resto del elenco se “fracturó” tras la pérdida del actor, quien interpretó a Finn Hudson. “Para mí fue muy duro. Me derrumbé por completo”, expresó conmovida.

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Aunque algunos compañeros encontraron apoyo mutuo en el set, Michele confesó que no fue su caso. A los 26 años, enfrentó el duelo sin una guía clara, mientras trataba de mantenerse firme en su trabajo. “Nadie me dijo cómo hacerlo, fue una educación emocional exprés que me sobrepasó”, comentó. La presión por continuar con las grabaciones sin detenerse también pesó sobre sus hombros, pues sentía que si no trabajaba, otros perderían su empleo.

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Pese a todo, Michele expresó gratitud hacia quienes la respaldaron silenciosamente en esos momentos difíciles. Sin embargo, su testimonio llega años después de que fuera criticada por su conducta durante los rodajes. Actores como Samantha Ware y Heather Morris la señalaron por actitudes negativas, incluso calificándola como una “pesadilla” en el trabajo. Michele no abordó directamente estas acusaciones en el pódcast, pero sí desmintió con humor los rumores sobre su supuesta incapacidad para leer.