Giorgio Armani, reconocido diseñador y empresario italiano, falleció a los 91 años dejando un legado que transformó la industria de la moda. Fundador de una de las marcas más influyentes a nivel global, revolucionó la sastrería masculina e introdujo los trajes femeninos que marcaron un antes y un después en la forma de vestir de millones de personas. Su empresa confirmó la noticia, recordando su estilo inconfundible y su papel como símbolo de la elegancia italiana.

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El diseñador combinó su talento creativo con una visión empresarial única, consolidando un imperio que facturaba miles de millones de euros al año. A lo largo de su trayectoria, vistió a estrellas de Hollywood y a figuras del deporte, convirtiéndose en referente absoluto de sofisticación. En junio de 2025, Armani ya había anunciado que no participaría en la Semana de la Moda de Milán por motivos de salud, aunque siguió de cerca sus desfiles desde casa.

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Nacido en 1934 en Piacenza, Italia, su vida estuvo marcada por la posguerra y un inicio académico en medicina, hasta que encontró en la moda su verdadera vocación. Desde sus primeros trabajos en La Rinascente hasta la fundación de su firma en los años 70, Armani consolidó un estilo atemporal que traspasó fronteras. Con más de dos mil tiendas en el mundo y una fortuna superior a los 12 mil millones de dólares, dejó no solo una marca de lujo, sino una visión que redefinió la elegancia contemporánea.