Un fotoperiodista conocido como Jordi Martín ha sido condenado a seis meses de cárcel por un delito de lesiones y otros seis meses por acoso continuado hacia Clara Chía, pareja sentimental del ex futbolista Gerard Piqué. Además, deberá pagar una multa de más de 13,000 euros y se le ha impuesto una orden de alejamiento de un año y medio respecto a la joven.
También te puede interesar: Las causas detrás de la pelea entre One Direction y Simon Cowell
La sentencia emitida por un juzgado de lo penal de Barcelona detalla que Jordi Martín llevó a cabo un seguimiento insistente y reiterado de Clara Chía entre agosto de 2022 y mayo de 2023, incluyendo visitas frecuentes a su domicilio y lugar de trabajo, así como persecuciones dentro del garaje privado.
El juez calificó la conducta del paparazzi como intimidatoria y perturbadora, generando un considerable malestar y afectación emocional en Clara Chía. Según la sentencia, el comportamiento de Martín traspasó los límites de la mera molestia para convertirse en un hostigamiento intenso y patológico, exacerbado por la atención mediática que rodeaba su relación con Piqué.
También te puede interesar: Lila Avilés, directora de ‘Tótem’, y Kate del Castillo, entre los nuevos miembros invitados por la Academia de Hollywood
La relación entre Clara Chía y Gerard Piqué atrajo una gran atención mediática desde su inicio, provocando la separación del futbolista con la cantante Shakira en diciembre de 2022. Esta situación fue ampliamente cubierta por los medios, incluyendo la reacción de Shakira en su música posterior.
Tras conocer la sentencia, Jordi Martín expresó su desacuerdo a través de sus redes sociales, defendiendo su trabajo periodístico y anunciando su intención de apelar la decisión judicial. Insistió en que su labor se llevó a cabo dentro de los límites legales y reafirmó su compromiso con la libertad de prensa.
También te puede interesar: Disney Plus y Star Plus se fusionan en una misma plataforma: estos son los nuevos precios en México
El caso de Jordi Martín subraya los desafíos éticos y legales que enfrentan los paparazzi en su búsqueda por obtener imágenes exclusivas en el ámbito de las celebridades, y reaviva el debate sobre los límites de la libertad informativa y el respeto a la privacidad personal.