Pedro Pascal vivió uno de los mayores retos físicos de su carrera durante el rodaje de Gladiator II, donde protagoniza un impactante duelo con Paul Mescal. Lejos de limitarse a una escena coreografiada, la confrontación exigió fuerza, velocidad y resistencia, llevándolo a entrenamientos extremos para igualar la condición atlética de su joven compañero de reparto.

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El actor chileno describió la experiencia como “brutal” y apodó al irlandés como “el Muro Paul”, reconociendo que enfrentarse a él fue más duro que cualquier escena previa. La diferencia generacional —Mescal tiene 20 años menos— fue evidente no solo en el set, sino durante los entrenamientos, donde Pascal optó por un riguroso plan físico para evitar lesiones y estar a la altura del personaje. “Preferiría que me tiraran de un edificio antes que volver a pelear contra él”, bromeó.

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Esa preparación no solo fue clave para Gladiator II, sino que también lo dejó listo para su próximo reto en Los 4 Fantásticos: Primeros pasos, donde encarna a Reed Richards. Con ayuda del entrenador David Higgins, Pascal siguió una rutina enfocada en movilidad, calistenia y fortalecimiento abdominal, sin buscar músculos exagerados, sino eficiencia funcional. A sus 49 años, el actor prioriza el autocuidado y la prevención, demostrando que la edad no impide convertirse en una estrella de acción si hay disciplina y compromiso físico.