Información por Jeanette Trillo
El término «body shaming» se refiere al acto de hacer comentarios negativos sobre el cuerpo de otra persona, estos pueden estar dirigidos hacia tu propio cuerpo o al de otra persona.
Estos comentarios van desde el tamaño de una persona, la edad, el cabello, ropa, comida, o si la persona es percibida como atractiva.
Esta lamentable y normalizada práctica puede llegar a tener graves consecuencias, pues puede afectar de gran manera la salud mental de quien recibe estas críticas, algunas de estas pueden ser el desarrollo de desórdenes alimenticios, ansiedad, depresión, baja autoestima, dismorfia corporal, así como el sentimiento de odiar nuestro cuerpo.
La idea de que un cuerpo delgado representa belleza y salud esta fuertemente incrustada en la sociedad de hoy en día. Esto lo podemos apreciar sobre todo en la televisión, donde, a pesar que algunas compañías han tratado de incluir modelos de tallas reales en sus anuncios, aún se utilizan personas delgadas y con cuerpos delineados para representar productos de belleza y salud.
Sin embargo, este pensamiento difiere mucho de la percepción que se tenía en tiempos antiguos. Alrededor de los 1,800 he incluso mucho antes, cuando las clases sociales se encontraban fuertemente divididas, se creía que una persona regordeta representaba riqueza y acceso a alimentos, mientras que una persona delgada representaba pobreza y escasez.
A pesar de la gran diferencia de culturas que existen en el mundo, estos pensamientos se encuentran fuertemente arraigados en la mayoría de ellas, al punto de que existen países en los cuales se cree, por ejemplo, que un hombre o mujer no debe mostrar su abdomen si los músculos de este no se encuentran definidos.
Generalmente el body shaming se encuentra enfocado en el tamaño del cuerpo de una persona y, a pesar que se tiene la idea que solo las personas con mayor masa reciben estos comentarios, también las personas muy delgadas llegan a sufrir de la misma manera.
Debemos hacer lo posible como sociedad para detener este fenómeno, pues solo trae consecuencias graves para quien lo recibe y aunque se llegue a disfrazar de «critica constructiva» está muy lejos de cumplir con este término.
Entonces, ¿qué medidas podemos tomar para evitar el body shaming?, primero que nada es el abstenerte de formas parte de estos comentarios, aunque las criticas hacía el cuerpo de una persona se encuentren normalizadas, eso no significa que sea correcto, no opines sobre los cuerpos de los demás, no hagas cosas que no te gustaría que te hicieran a ti. Fomentar la aceptación del cuerpo de uno mismo y enfocarse en la salud de una persona antes que en su imagen puede ayudar de gran manera a la inclusión.
Cuando te sientas en necesidad de opinar sobre el cabello, la ropa o una característica física de alguien, detente un momento y piensa mejor en algún cumplido que podrías decirle a la otra persona, y si por alguna razón no encuentras nada bueno que decir, mejor no digas nada.
Es responsabilidad de todos nosotros como sociedad el asegurar que todas las personas, sin importar la edad, físico, género, etc, vivan en un ambiente seguro y sano que propicie la mejora de su salud mental.