Una de las ventajas que te puede dar el agua de lluvia es que tiene la mayor concentración en dióxido de carbono en relación al agua potable, esto permitirá que la planta pueda acelerar su proceso de crecimiento e incluso penetrar de forma más profunda en la tierra, lo que aporta mayor cantidad de nutrientes a sus raíces.

Juntar agua de lluvia y usarla en el riego de las plantas es una magnifica opción, pues les estas otorgando un riego de calidad y agua con más pureza.

Algunos de beneficios que te puede otorgar el agua de lluvia en tus plantas:

1. El agua de lluvia es un poco más ácida, contiene dióxido de carbono disuelto, lo que produce un ácido carbónico muy débil, esto provoca acelerar el proceso de crecimiento de la planta.
2. Otra de las ventajas es que no contiene cloro. Las altas concentraciones de cloro que contiene el agua potable pueden afectar negativamente al crecimiento de las plantas.
3. Al momento de usar fertilizante, puede que en ocasiones quede excedente en las plantas, por lo que el agua de lluvia ayudará a disolver mejor ese sobrante, ya que permite una mejor filtración al suelo y mejorando su fertilidad.
4. Puede penetra en el suelo a mayor profundidad que el agua potable. Esto permite llevar los nutrientes a zonas más profundas de las raíces.



I. Aprovechar el agua de lluvia para riego

Lo que deberás hacer primero es realizar un mecanismo para recolectar el agua de la lluvia, esto tiene que ver con la instalación de canaletas que estén situadas en los bordes del techo de la casa, para que permita que el agua llegue a la tubería que las llevara al balde o contenedor del agua. Es recomendable que instales una rejilla tipo mosquitero en el balde, para que se filtre la suciedad que pueda arrastrar el agua en su camino hasta él.

II. Exceso de agua de lluvia en las plantas

Si la planta cuenta con un exceso de agua tanto de lluvia como potable, sus hojas comenzarán a ponerse amarillentas, posteriormente marrones, por lo que se tendrá que poner remedio, si no llegar a morir. Todas plantas requieren de aire, teniendo dos vías para recolectarlo: por medio de sus hojas y la otra forma es por sus raíces. Si la raíz se encuentra inundada por el agua, esta no tendrá manera de donde tomar el oxígeno que requiere para su crecimiento necesario.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *