La esofagitis eosinofílica es una enfermedad conocida desde hace 30 años y se ha detectado un aumento en los casos nuevos de esta enfermedad en los últimos años.
Es una enfermedad que se caracteriza por la inflamación crónica de un tipo de glóbulos blancos (eosinófilos) que se pueden encontrar en la pared del esófago, sin embargo, en condiciones normales estos glóbulos no deben estar presentes en el esófago.
Esta acumulación de eosinófilos se produce por algunos alimentos y/o elementos ambientales como el polen y los ácaros.
Algunos de los alimentos que más frecuentemente están relacionados con este tipo de esofagitis es la leche de vaca, el trigo, el huevo y las legumbres.
Esta enfermedad es la primer causa de dificultad para tragar, lo cual impacta en la alimentación en niños y adultos jovenes.
Es además, la segunda causa de inflamación del esófago luego de la enfermedad por reflujo gastroesofágico.
Los síntomas que pueden llegar a presentarse en esta enfermedad son:
- Dificultad para tragar
- Sensación de que la comida se atasca en el esófago después de tragar
- Dolor en el pecho, que se localiza a menudo en el centro y no responde a los antiácidos
- Reflujo o alimentos sin digerir
Si presentas alguno de estos síntomas acude a tu médico.
Información por: Jeanette Trillo