Cuando un perro se pierde, puede parecer que está haciendo una travesía imposible, pero en realidad, estos animales tienen habilidades sorprendentes para orientarse y regresar a su hogar. A través de potentes sentidos, como el olfato, y la capacidad de usar el campo magnético de la Tierra, los perros pueden recorrer distancias impresionantes para reunirse con sus dueños. Casos como el de Georgia May, que caminó 60 kilómetros en 2015, o el de Bobbie, quien recorrió más de 4500 kilómetros en seis meses en 1924, demuestran que los perros pueden ser increíblemente persistentes y astutos.

También te puede interesar: Tokio, ciudad donde tu mascota extraviada puede ser encontrada

Los perros heredan sus habilidades de rastreo de sus antepasados, los lobos grises. Esto les permite formar mapas mentales de su entorno, basados en olores y otros puntos de referencia. Un perro perdido puede utilizar estos mapas, ayudado por su agudo sentido del olfato, que es entre 10,000 y 100,000 veces más sensible que el de los humanos. Además, los perros pueden reconocer lugares familiares mediante la vista, el olfato y el oído, lo que les permite seguir un camino directo hacia su hogar.

También te puede interesar: La conexión única entre humanos y perros

Investigaciones recientes han sugerido que los perros también podrían usar el campo magnético terrestre para orientarse. En un estudio de 2020, se observó que algunos perros de caza tomaban rutas que indicaban una capacidad para detectar y seguir el campo magnético, una habilidad que compartían con otras especies como las aves migratorias. Aunque no hay pruebas concluyentes, los expertos creen que esta es una de las explicaciones más plausibles para entender cómo los perros logran encontrar el camino a casa.