Durante las celebraciones decembrinas, las rutinas suelen alterarse por reuniones, viajes y cambios constantes en el ambiente, lo que puede generar estrés en perros y gatos. Para evitar que estas fechas se conviertan en una experiencia abrumadora para ellos, es importante mantener, en la medida de lo posible, sus horarios de comida, paseos y juego, ya que estos hábitos les aportan estabilidad y tranquilidad.

También te puede interesar: Cascabeles y gatos: una combinación peligrosa

Además, crear un espacio seguro dentro de casa resulta fundamental. Un área tranquila con su cama, mantas o juguetes favoritos puede servir como refugio ante ruidos fuertes, invitados o estímulos inesperados. Asimismo, vigilar su alimentación es clave: alimentos típicos de estas fechas, como el chocolate, las uvas o las nueces, pueden ser perjudiciales, por lo que es mejor optar por premios diseñados especialmente para ellos.

También te puede interesar: Nochebuena y perros: lo que debes saber

Si vas a viajar, es recomendable planificar con anticipación, revisar la documentación necesaria, asegurar su identificación y garantizar un transporte adecuado mediante un arnés o transportín. En caso de que se quede en una guardería o con un familiar, asegúrate de que el entorno sea seguro y familiar para evitar ansiedad. Finalmente, frente a ruidos como petardos o cohetes, considera el uso de feromonas, camisetas antiestrés o técnicas de desensibilización para que tu compañero peludo se mantenga lo más calmado posible durante las festividades.