Es un error común creer que los gatos no son tan cariñosos como los perros, simplemente porque sus formas de expresar afecto son más sutiles. Mientras que los perros suelen ser más explícitos al mostrar su amor, como al saltar o lamer, los gatos prefieren métodos más discretos para comunicar su apego. Esto no significa que el vínculo con tu gato sea menos fuerte; de hecho, entender sus gestos puede profundizar la conexión que tienes con tu felino.

También te puede interesar: Cómo evitar que los gatos rasguñen los muebles

El lenguaje corporal de los gatos es una de las formas más claras en que muestran afecto. Cuando un gato pasa rozándose contra tus piernas o te roza con su cola, está usando su cuerpo para expresar su amor. Una cola erguida con una ligera curva en la punta es un claro indicador de que tu gato está feliz de verte. De manera similar, cuando un gato te ofrece su vientre para que lo rasques, está demostrando un nivel de confianza y cariño absoluto.

También te puede interesar: El oído de los perros, un sentido excepcional

Además del lenguaje corporal, los gatos también utilizan sonidos y contacto visual para mostrar afecto. El ronroneo es quizás el sonido más conocido que indica satisfacción y placer, especialmente cuando están cerca de ti. El contacto visual directo, aunque puede parecer intimidante, es en realidad una señal de que tu gato confía en ti y te aprecia. Cuando tu gato te mira fijamente y parpadea lentamente, te está enviando un “beso” felino, una muestra clara de su cariño.

También te puede interesar: Percepción del tiempo en los gatos

Entender estos comportamientos es clave para fortalecer tu relación con tu gato y reconocer las múltiples maneras en que te demuestra su amor.