Toda planta puede ser reproducida a partir de un esqueje y la planta de la pitahaya no es la excepción. Hablar de esquejes es hablar de tallos de la propia planta madura que podrás utilizar para que crezca tu siguiente planta.
Recuerda que es indispensable que tu planta este madura para poder recortar uno de sus tallos. Utiliza unas tijeras de jardinería para corta con cuidado una rama de unos 30 cm. No cortes demasiada planta y tampoco con mucha fuerza, ya que podrías afectar el crecimiento de la primera.
El esqueje que has cortado, lo puedes dividir en tres o cinco trozos. Cada trozo puede propagar una nueva planta de pitahaya. Asegúrate de plantarlas en posición vertical para que crezcan correctamente. Deja cada nuevo esqueje en un
lugar cálido y seco para que tenga tiempo de recuperar los bordes.
Antes de plantarlas, puedes aplicar un poco de fungicida a cada esqueje, esto ayudar a prevenir enfermedades.
I. Planta los esquejes
Con cada esqueje, deberás de colocar la base uno o dos centímetros por debajo del suelo, presiona la tierra que se encuentra a su alrededor para mantenerlo seguro y erguido.
Como te comentamos anteriormente, deberás asegurarte que los esqueje sean plantados en la misma dirección en la que crecían en la rama original: lo mismo sucederá con el extremo más cercano a la base de la planta original, pues esta debe ser el extremo que este plantado en el suelo, y el extremo más cercano a la punta de la rama original debe ser la que sobresalga de la superficie del suelo.
Procura rocía el lecho de tierra del esqueje constantemente, pues este debe de mantenerse uniformemente húmedo. Si tienes paciencia, en un tiempo de tres o cuatro semanas empezarás a ver un nuevo crecimiento, pues las raíces se estarán desarrollando.
En la medida que vayan creciendo, deberás trasplantarlos a una maceta más grande, para que puedan crecer totalmente saludables.
II. Cómo se cosechan las pitahayas
Ya que tu árbol de pitahaya crezca y empiece a dar sus frutos, la cosecha de estos será muy fácil. Busca los frutos que tengan color vivo y que sus aletas exteriores se hayan empezado a marchitar.
Con mucho cuidado, puedes retuerce la fruta con cuidado y esta se desprenderá fácilmente del tallo. No dejes que la fruta se desprenda del tallo por sí sola, ya que esto indicará que estará muy madura para consumirse.
La pitahaya puede durar varios días en temperatura ambiente o hasta dos semanas en el refrigerador, siempre y cuando no le hayas retirado su piel, de otra manera se perderá el fruto.
