El entutorado es una técnica que se utiliza como apoyo para las cosechas de árboles frutales. Esta consiste en guiar o dirigir una planta atando algunas de sus ramas en algún soporte para facilita su crecimiento y la producción de frutas. Con esta técnica se prevé que se ensanche la planta en demasía y evitar que se rompa o se deteriore el crecimiento de la planta.
Se pueden emplear utensilios de diferentes materiales, pueden ser flexibles o que tengan cierta dureza, dependerá mucho de los objetivos que se tenga y de las exigencias de la misma plantación.
I. Objetivo del entutorado en árboles frutales
Con el entutorado lo que se busca es la conservación, el enraizamiento y el crecimiento adecuado del árbol o de la planta. También tiene los siguientes beneficios:
• Minimiza el espacio: Evita que la planta tome un tamaño demasiado grande, impidiendo que otras plantas pudieran ser plantadas y cosechadas.
• Evitar que los frutos se vean perjudicados: En algunas ocasiones los frutos suelen ser muy pesados y hacer que las ramas de los árboles frutales cayeran hasta el suelo y el fruto perdiera su calidad.
• Fin estético para jardines: Este es el caso de plantas ornamentales, pues también es posible entutorar sus ramas para proporcionar un aspecto más “controlado” y estético.
II. Técnicas para entutorar
Los expertos señalan las siguientes técnicas de entutorado:
• Entutorado sencillo: Se usan cuerdas biodegradables, enganchadas a un techo o guía superior a las plantas.
• Entutorado holandés: Requiere de dos tutores, uno para subir y otro para bajar, produciendo una duplicación de la superficie de crecimiento para la planta o árbol frutal.
• Entutorado danés: Se utilizan tutores movibles y en forma de carreta, los cuales se van desplazando de acuerdo al crecimiento de la planta.
