Información por: Jeanette Trillo

Los músculos de nuestra espalda son los que más sufren después de un arduo día de trabajo y sin un adecuado cuidado pueden llegar a causarnos muchos problemas. A continuación mostramos una serie de ejercicios sencillos que se pueden realizar en casa para estirar los músculos y aliviar el dolor.

-Antes de comenzar colócate en una superficie plana y suave, puede ser un tapete de yoga o un colchón.

-Inicia haciendo rotaciones lentas de tus articulaciones de cabeza a pies al menos 8 veces por articulación.

-Para la posición de inicio comenzaras sentado sobre tus talones y con las rodillas separadas, lleva tu pecho hacia el piso y estira los brazos hacia adelante, permanece en esa posición por al menos 30 segundos.

-En la misma posición anterior lleva tu brazo derecho por debajo de tu brazo izquierdo y estíralo lo mas lejos que puedas, esta bien apoyar tu hombro en el piso, mantén esta posición por 20 segundos y repite con el brazo izquierdo.

-En la posición con que iniciamos, lentamente vamos a hacer círculos con nuestro torso, llevándolo hacia el lado izquierdo, al frente, al lado derecho y atrás, repitiendo este movimiento 8 veces y luego cambiando de dirección para repetir 8 veces más.

-Regresando a la posición de inicio coloca tu mano derecha por encima de tu mano izquierda para estirar el lateral, permanece así 15 segundos y repite llevando ahora la mano izquierda por encima de la mano derecha.

-Recuéstate boca abajo con las piernas estiradas, apoya tus manos en el piso a la altura de tus hombros y levanta tu torso del piso, tus brazos deben de estar estirados completamente y tu cadera un poco despegada del piso, permanece en esta posición por 30 segundos.

-Por último siéntate frente a una pared, recuéstate y sube tus pies a la pared, separa tus piernas un poco por fuera del ancho de tus hombros permanece en esta posición por 1 minuto mientras haces respiraciones profundas.

Colocar una almohada por debajo de tus rodillas, si duermes boca arriba, o entre tus piernas, si duermes de lado, ayuda a descargar la presión en tu espalda durante la noche.

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