Expertos señalan que ciertas rutinas tales como: lo laboral, las rutinas diarias, el consumismo, la competitividad y la desconexión de nuestras emociones nos pueden llevar o colocar en una zona de confort poco enriquecedora y quedar atrapados en lo que llaman “rueda de hámster”.

Esta imagen es metafórica, pero perfecta para ejemplificar el desgaste constante e improductivo que se tiene en donde se observa que la vida va pasando mientras la motivación se va apagando.

Para poder bajar de esta rueda, es importante reconocer nuestro estado emocional y las trabas que nos mantienen en ella, esto nos ayudara a encontrar paso a paso las estrategias para salir del estancamiento. A continuación, conocerás algunos consejos que te pueden ayudar a salir de la rutina improductiva.

1. Disminuir el ritmo de productividad

El ritmo de la vida y la autoexigencia por tener una alta productividad está obligando a sacrificar la salud mental, es por ello que buscar momentos de relajación en entornos tranquilos es indispensable (si dejas a un lado la constante interacción al celular será mejor).

2. Busca actividades creativas

Las mejores acciones para distraerse y conectarse consigo mismo es la realización de actividades vinculadas a la creatividad como: escribir, pintar, realizar manualidades o aprender hasta un oficio, esto estimulará tu imaginación.

3. Retomar o buscar nuevas relaciones

El hombre por naturaleza es sociable, pero en la actualidad las personas se enfocan en rutinas repetitivas que las alejan de las interacciones con otras personas, es por ello que se recomienda que se vuelvan a buscar a personas que se fueron alejando e incluso interactuar con nuevas, pero sin la ayuda de redes sociales.

4. Cambiar la rutina laboral

Es muy probable que lo que más nos ate a la «rueda del hámster», sea nuestro trabajo, ya que por razones económicas no podemos abandonar el confort aunque exista un riesgo mental latente.

Se recomienda priorizar otros aspectos de la vida y tomar valor para hacer lo adecuado. Siempre habrá riesgos e incertidumbre en tomar decisiones, pero cuando la situación es insostenible, hay que tomar impulso y afrontar con valentía las consecuencias.

5. Ahorrar dinero

El temor principal para modificar la rutina laboral es lo económico. Es por ello que se recomienda tener ingresos extras generados con otra actividad o contar con un fondo de ahorro que te ayude a buscar diferentes estrategias para que tomes la mejor decisión.

6. Afrontar contratiempos

Al tomar acciones arriesgadas siempre pueden surgir contratiempos, pero es fundamental afrontarlos y no volver atrás, ya que significaría regresar a la «rueda del hámster».

7. Objetivos claros

Busca objetivos a corto y mediano plazo, siempre confiando en tus habilidades para lograrlos. Mientras más claras sean las metas, te resultará más sencillo lograr el cambio de hábito.

Para ejercitar la mente debes olvidarte de patrones conocidos que ya han mostrado ser inútiles o insuficientes, intenta nuevas formas de hacer las cosas, integrar nuevas creencias, nuevos hábitos y arriesgarse a lo desconocido, te puede traer otro mundo que te puede resultar más atractivo.

Por último, debes de tener en mente y considerar que este proceso no será sencillo, pues la inercia de llevar años corriendo en la rueda no es fácil de detenerla. Por ello, buscar contar con el apoyo de un profesional siempre, te ayudara a conocer tus fortalezas y áreas de oportunidad.

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