Nota y fotos por: Silver Juárez Arce

En entrevista al diputado Guillermo Ramírez, responsable de la conducción del proceso en el Legislativo estatal, se planteó hoy la necesidad de establecer mecanismos formales de comunicación entre productores del campo y gobierno, con el fin de construir una ley que atienda sus demandas. Ramírez explicó que, pese a los conflictos recientes, “ese canal de comunicación” —eufemismo que el mismo legislador utilizó— representa el único mecanismo viable que los agricultores han encontrado para ser escuchados.

El diputado enfatizó que, si bien la urgencia del diálogo es evidente, lo indispensable ahora es crear mesas de trabajo que permitan llegar a consensos. Insistió en que estas mesas deben concretar acuerdos “entre los productores y el gobierno”, de modo que la legislación resultante beneficie a los agricultores y, al mismo tiempo, contribuya a regular el campo con orden y certeza.

Respecto a las críticas hechas por figuras como el exgobernador Javier Corral Jurado o un senador de su partido tras la elección reciente —que tacharon el nombramiento como un “auditor a modo” y acusaron al Legislativo de malas prácticas— Ramírez defendió la legitimidad del proceso. Recordó que la designación del titular de la auditoría se hizo luego de un análisis a fondo por un panel de especialistas, quienes revisaron los perfiles de los aspirantes y presentaron una terna ante el pleno. Tras ello, el Congreso votó de manera libre, lo que derivó en una decisión por mayoría para el nuevo responsable.

De acuerdo con Ramírez, hay absoluta confianza en que quien resultó electo como auditor estará “a la altura de lo que demanda” el Estado. Con ello, dio por cerrado un nuevo capítulo de polémica que, según él, debe dejar de lado los intereses partidistas para enfocarse en la institucionalidad.

Este pronunciamiento ocurre en medio de un contexto de tensión en la entidad: la reciente ratificación del titular de la Auditoría Superior del Estado de Chihuahua (ASE) ha generado críticas públicas desde el entorno del exgobernador Corral, lo que ha reavivado el debate sobre la transparencia y autonomía de los órganos de control.