Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
En una escena que resquebraja el corazón en el Día del Abuelo, la cámara de Ocho Ochenta Noticias capturó a una abuelita solitaria trabajando en la calle, vendiendo semillitas y pistaches cerca del edificio de Héroes de Revolución en Chihuahua. La triste imagen cobra mayor peso al recordar que apenas el sábado, otro reportaje mostraba a otra abuelita en situación similar, vendiendo los mismos productos en el centro histórico, cerca de la Catedral de Chihuahua.
En un día que debería estar lleno de cariño y homenajes para los abuelos, estas abuelitas se ven obligadas a salir a las calles a trabajar, enfrentando las inclemencias del tiempo y el desinterés de quienes pasan a su lado. La coincidencia de ambas historias destaca una problemática que va más allá de un caso aislado: la realidad de abuelos abandonados y en condiciones precarias.
Mientras algunas familias celebran el Día del Abuelo con regalos, abrazos y atenciones, estas dos mujeres luchan por subsistir en una situación que debería estar lejos de ser su realidad. Sus arrugas cuentan historias de vida, sacrificio y esfuerzo, pero también reflejan la invisibilidad y el abandono que muchos abuelos enfrentan en su vejez.
Mientras algunos disfrutan de la compañía y el amor de sus seres queridos, otros enfrentan la dura realidad de tener que trabajar para sobrevivir. Es un llamado a reflexionar sobre la responsabilidad que tenemos como sociedad para garantizar que nuestros abuelos sean tratados con dignidad y respeto, y no abandonados a su suerte en la última etapa de sus vidas.
