Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
En el corazón de Chihuahua, justo en la esquina de las calles Nery Santos y Aldama, se encuentra un espectáculo de destreza y perseverancia que a diario captura la atención de los transeúntes. Mario Alberto Rentería, un chihuahuense de corazón aunque nacido en Ciudad Juárez, y su compañero de malabarismo, Israel, se ganan la vida en los semáforos, demostrando su habilidad con una sonrisa en el rostro.
Sin embargo, tras su increíble destreza en las calles de Chihuahua, Mario Alberto Rentería esconde una historia de superación que inspira a todos aquellos que tienen la fortuna de cruzarse con él. Hace dos años y medio, Mario sufrió un grave accidente en una motocicleta que le cambió la vida, perdiendo su pierna derecha.
Pese a las dificultades que ha enfrentado, Mario encontró en el arte del malabarismo una forma de sobrellevar su situación y brindar a su familia una fuente de ingresos. Con el apoyo de su compañero Israel, han encontrado un rincón especial en el corazón de la ciudad donde despliegan sus habilidades.
En una entrevista con Mario Alberto Rentería, se reveló que aunque no es nativo de Chihuahua, ha estado en la ciudad durante dos años, tras haber crecido en Estados Unidos y regresar a México. Su motivación principal es proporcionar para su familia y darles el apoyo necesario.
Este dúo dinámico de malabaristas se puede encontrar en el semáforo de la calle Aldama y Vicente Guerrero, o en días alternos en la intersección de Juárez y Once. Su elección de lugares depende de cómo esté el flujo de personas y la afluencia de vehículos. Trabajan incansablemente bajo el sol y la lluvia, llevando su espectáculo de malabarismo a las calles.
