Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
Con la llegada de los casinos en los años 2000, los juegos de azar que estuvieron prohibidos durante muchos años en México, también surgieron problemas. Muchas personas se quedaron en la bancarrota, separaciones de parejas y en algunos casos incluso se registraron suicidios debido a que se quedaron sin un «cinco» por la pérdida de todo su dinero en las casas de apuestas. Personas que anteriormente ahorraban y no gastaban en nada, cayeron en la tentación del juego y perdieron todo su dinero en las apuestas.
Además, algunas mujeres solas se refugiaron en los casinos y terminaron perdiendo hasta su herencia. Existen muchas historias, como la de un hombre que liquidó su trabajo para entretenerse un rato y terminó sin nada. En el peor de los casos, se pueden encontrar lugares de alcohólicos anónimos en cada colonia, pero no hay lugares de jugadores anónimos disponibles. Los pocos lugares que existen para tratar la ludopatía son muy caros, lo que hace que sea difícil para los jugadores dejar de apostar.
