Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

En una muestra impresionante de creatividad y habilidad, el licenciado José Luis Ordóñez ha logrado convertir un carrito tipo antiguo en una extraordinaria moto personalizada. Hace unos días, compartió su historia con nosotros, mostrando el proceso de construcción y dejando a todos impresionados con su inventiva.

Hoy, nos encontramos en la casa de José Luis para presenciar su último proyecto: la construcción de una moto única en su género. Con un par de llantas adicionales, un volante y un techo improvisado, José Luis ha transformado su vehículo en una increíble creación de cuatro ruedas.

Durante nuestra entrevista, el entusiasmado constructor nos dio detalles sobre su nueva creación. La moto, que cuenta con un motor de 150 cilindradas, es automática y no requiere de embrague. Aunque no está seguro del modelo exacto, José Luis recibió el motor como regalo y decidió construir la moto desde cero.

La innovación y la adaptación son evidentes en cada aspecto de esta moto personalizada. Con tres llantas, dos en la parte delantera y una en la parte trasera, José Luis ha implementado frenos y acelerador de pedal, convirtiendo la moto en un híbrido de características únicas. El volante, de manejo manual, le brinda un toque especial a su vehículo casero.

Al preguntarle sobre los detalles de su moto, José Luis mencionó que algunas partes fueron obsequiadas por amigos. Las farolitas delanteras, por ejemplo, fueron un regalo especial que le añade un toque distintivo a su creación.

Con admiración, le preguntamos a José Luis cuánto tiempo lleva construyendo esta moto tan particular. Nos reveló que ha invertido ocho meses en el proyecto, y aunque ya está prácticamente terminada, tuvo algunos contratiempos con la batería, la cual espera reemplazar pronto para poder salir a las calles.

Este ingenioso constructor también tiene planes de colocarle micas al frente de la moto para mayor seguridad. Consciente de los riesgos que pueden presentarse en la vía pública, José Luis busca protegerse de manera adecuada.

En medio de nuestro encuentro, le preguntamos cuándo podríamos verlo conduciendo su creación por las calles. Con una sonrisa, nos aseguró que pronto saldrá a recorrer la ciudad en su moto personalizada, una vez solucione los problemas técnicos pendientes.

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