Fotografía por: Silver Juárez

Chihuahua, Chih.— La mañana de este miércoles, en el cruce de Escorza y Vicente Carranza, un vehículo Aveo con placas DYZ-040B, presuntamente perteneciente a empleados del Gobierno del Estado, protagonizó una maniobra que pone en entredicho el respeto a las normas viales por parte de quienes deberían ser ejemplo de civilidad.

El conductor del automóvil se pasó la luz roja del semáforo y, lejos de corregir su acción, realizó su alto justo sobre el paso peatonal, bloqueando el cruce de decenas de personas que se dirigían a sus trabajos o al Centro Histórico. Testigos señalaron que el acto no solo fue imprudente, sino peligroso, especialmente para adultos mayores y personas con movilidad reducida que transitan por la zona.

Este tipo de conductas, cuando provienen de servidores públicos, generan indignación entre la ciudadanía. “Si ellos no respetan las reglas, ¿qué podemos esperar del resto?”, comentó una transeúnte que tuvo que esquivar el vehículo para cruzar la calle.

Las autoridades de tránsito han reiterado que el respeto al semáforo y al paso peatonal no es opcional, y que obstruirlo puede derivar en sanciones. Sin embargo, la aplicación de estas medidas parece ser desigual cuando se trata de vehículos oficiales.

Si el civismo se midiera por el respeto al semáforo, más de uno reprobaría con matrícula de gobierno.