Nota y fotos por: Silver Juárez Arce

El verano llegó oficialmente a Chihuahua este sábado 21 de junio de 2025, con un ambiente particularmente sofocante. Aunque el cielo mostró nubes dispersas y algunos claros, la capital estatal comenzó el día con 24°C, y se espera que las temperaturas continúen aumentando a lo largo del día.

En las calles del centro, dos mujeres llamaron la atención al usar carpetas de oficina como escudo contra el sol, una imagen que capturó la esencia de la lucha diaria contra la intensa radiación. Aunque el pronóstico anuncia lluvias para el norte del estado por la influencia indirecta del huracán Andrea, el primer ciclón nombrado de la temporada 2025 en el Atlántico, las nubes solo ofrecen un alivio temporal durante la mañana. “Mientras no caiga agua, el calor sigue mandando”, comentó un vendedor ambulante cerca de la Plaza de Armas, donde sombrillas y periódicos se convirtieron en artículos esenciales.

La humedad ha descendido al 20% a media mañana, agravando la sequedad ambiental típica de junio, un mes que generalmente registra máximas de 30°C pero que este año ha superado los registros habituales. Se espera que la humedad aumente y las probabilidades de tormenta aumenten al 70% para la noche, con posibles acumulados de lluvia y un descenso térmico. Este cambio, asociado a bandas nubosas periféricas de sistemas tropicales lejanos, contrasta con la realidad vivida durante la mañana: vientos racheados del este de hasta 26 km/h que, lejos de refrescar, arrastran aire caliente.

El Servicio Meteorológico recordó que junio marca el preludio de la temporada de lluvias en la región, con un promedio de 10 días de precipitaciones que pueden acumular hasta 227 mm mensuales. Sin embargo, la transición entre la aridez y las tormentas vespertinas suele ser abrupta, como se experimenta hoy: un calor intenso que ha obligado a Protección Civil a emitir alertas por riesgo de deshidratación e insolación, especialmente tras el inicio formal del verano a las 14:51 UTC, cuando el hemisferio norte alcanzó su máxima inclinación hacia el Sol.

Mientras Chihuahua espera la llegada efectiva de las lluvias pronosticadas para los próximos días, la resiliencia ciudadana sigue siendo el mejor antídoto.