Nota y fotos por: Silver Juárez Arce

El Gobierno Municipal de Chihuahua y el Instituto de Planeación Integral del Municipio de Chihuahua (INPLAN) presentaron esta mañana los resultados del estudio ambiental de la Mesa de los Caballos, un análisis técnico realizado en un área de 500 hectáreas —de las cuales solo 2.5 corresponden a la mesa propiamente dicha— ubicado al poniente de la ciudad, donde termina la avenida Misión del Bosque. El documento, elaborado con datos satelitales, información climática de la NASA y trabajo de campo, revela que el 85% del polígono estudiado mantiene condiciones ambientales aptas para conservación, mientras que el 15% restante ya registra impactos urbanos o degradación, principalmente en la zona cercana a la infraestructura existente.

La Mtra. Alonja Martínez Ayón, directora del Instituto de Educación Integral del Municipio, y el Dr. Jesús Alejandro Frías de la Pará, responsable técnico del proyecto, explicaron que el estudio ratifica las directrices del Plan de Desarrollo Urbano (PDU) vigente, el cual ya establece áreas de preservación ecológica en la zona. “No habrá cambios en los usos de suelo donde el PDU marca preservación. Los desarrollos urbanos solo podrán realizarse en zonas ya catalogadas como urbanizables, siempre con medidas de mitigación ambiental”, afirmó Martínez Ayón. El Dr. Frías añadió que la zona actúa como reguladora hídrica, captura de carbono y barrera natural contra la erosión, además de ser un espacio de recreación para la ciudadanía, pero enfrenta presiones como incendios recientes, contaminación por desechos urbanos y un aumento en la temperatura con disminución en las precipitaciones.

Sobre el fraccionamiento Endoterra, clausurado por la Profepa, Martínez Ayón aclaró que la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología es la encargada de validar los estudios de impacto ambiental de los proyectos. “Cada desarrollador debe cumplir con la normativa ambiental. Si hay sanciones, son responsabilidad de las autoridades estatales o federales”, señaló. El estudio también destaca la necesidad de evitar dejar desechos en la zona, ya que se encontraron botellas, ropa y basura durante los recorridos.

El documento se integrará a la próxima revisión del PDU, priorizando la conservación de áreas como el Cerro Coronel, Cerro Grande, Picos de la Luna y Cañón del Mar, y se realizarán análisis similares en otras zonas de la ciudad para definir prioridades ambientales. Las autoridades hicieron un llamado a la corresponsabilidad ciudadana para proteger este capital natural, que requiere una gestión inteligente: conservar lo valioso y desarrollar solo lo viable, con criterios técnicos.