Nota por: Redacción – Fotos por: Silver Juárez Arce
Una vez más, el centro histórico de Chihuahua se convierte en el escenario de un vergonzoso episodio de desorden y violencia. Esta mañana, una riña estalló en el mercado del hoyo, con el estacionamiento como causa raíz. Sin embargo, este incidente no es más que la punta del iceberg de una serie de problemáticas que la Dirección de Vialidad y Tránsito, bajo el liderazgo de César Komaba, han fracasado estrepitosamente en abordar.
Los ciudadanos de Chihuahua han estado sufriendo durante demasiado tiempo las consecuencias de la incompetencia y la indiferencia gubernamental. Las quejas sobre la usurpación del espacio público por parte de los locatarios, quienes colocan toda clase de obstáculos, desde letreros hasta asadores, para apartar los espacios de estacionamiento, han caído en oídos sordos.
A pesar de la abrumadora cantidad de quejas presentadas por los ciudadanos, la dirección de Vialidad y Tránsito no ha tomado medidas efectivas para resolver esta situación.
La falta de acción se extiende incluso a la vigilancia vial, donde la corrupción parece ser moneda corriente. Los puntos estratégicos del centro carecen de vigilancia efectiva, mientras que los ciudadanos son testigos de cómo los agentes de tránsito solo se preocupan por extorsionar a los conductores, en lugar de cumplir con su deber de garantizar la seguridad vial.
Esta inacción son inaceptables. Los ciudadanos de Chihuahua merecen un gobierno que esté verdaderamente comprometido con su bienestar y seguridad. Es por eso que en Ocho Ochenta estamos lanzando una encuesta para que la voz del pueblo se haga escuchar. Queremos saber cómo esta falta de acción gubernamental está afectando a los ciudadanos y qué piensan sobre esta situación que parece no tener fin.
Es hora de que el Gobierno de Chihuahua y la Dirección de Vialidad y Tránsito dejen de ignorar las necesidades de la ciudadanía y asuman su responsabilidad de manera seria y efectiva y no solo resuelvan problemáticas en sectores mas nuevos de la ciudad .
