Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
En la Plaza de Armas de Chihuahua, hoy nos topamos con Abel Quintana, un hombre de edad avanzada que quedó ciego hace 40 años después de una operación de cataratas que no tuvo éxito debido a la falta de tecnología. Abel estaba sentado en un banco cuando lo encontramos, acompañado por Jesús, un niño de 10 años que es hijo de un amigo suyo y que también ayuda a su propio padre ciego.
Abel nos contó su historia de cómo se quedó ciego, Dijo que su operación de cataratas se realizó hace mucho tiempo, cuando la tecnología médica no era tan avanzada como ahora, Desafortunadamente, la operación no fue exitosa y perdió la vista, Desde entonces, ha estado luchando para adaptarse a su nueva realidad y salir adelante.
Pero no está solo en esta lucha, Jesús lo acompaña cuando necesita salir de casa, y lo guía para que no tropiece o caiga, Jesús también ayuda a su padre ciego, que tiene problemas para moverse por la ciudad, Jesús es un niño muy inteligente y compasivo que entiende las dificultades que enfrentan las personas con discapacidad visual.
Cuando le preguntamos por qué ayuda a las personas ciegas, respondió: «Es algo bueno, ¿no? Quiero ayudarlos porque si yo estuviera en su lugar, también me gustaría que alguien me ayudara».
Mañana es el Día del Niño, y Jesús es un ejemplo de niño héroe que ayuda a estas personas con discapacidad visual,. Es un recordatorio de que todos podemos hacer una diferencia positiva en la vida de alguien, independientemente de nuestra edad o habilidades.
La bondad y la compasión de Jesús son algo que deberíamos celebrar no solo en el Día del Niño, sino todos los días.
