Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

En medio de la desolación y la incertidumbre, la familia Aguirre Guillén, residentes de la ciudad de Chihuahua, claman por ayuda para reconstruir su hogar, el cual colapsó hace casi un año debido a las intensas lluvias que azotaron la región.

El fatídico 3 de septiembre, la vivienda de Josefina Aguirre Guillén, ubicada en la calle 45, número #1213, se vino abajo tras días consecutivos de precipitaciones torrenciales. La humedad constante debilitó la estructura, y una mañana trágica, a las 7:00 a.m., toda la casa se derrumbó, dejando a la familia sin techo y con sus pertenencias sepultadas bajo los escombros.

Desesperados y sin recursos suficientes, los Aguirre Guillén recibieron únicamente unos pocos materiales por parte del municipio: bloques, cemento y varillas, insuficientes para reconstruir más que dos pequeñas habitaciones. Desde entonces, han estado viviendo en una casa alquilada cercana, tratando de hacer frente a su difícil situación.

Josefina Aguirre Guillén relata cómo se vio obligada a abandonar su dormitorio original por precaución, ya que la arena comenzó a deslizarse y el suelo se volvió inestable. Siguiendo el consejo de su hija, se mudó obedientemente a la sala, pero su estancia allí fue efímera, ya que al día siguiente ocurrió el desplome catastrófico.

«Nos quedamos sin nada. Todo lo que teníamos quedó sepultado bajo los escombros. El municipio nos brindó algo de ayuda, pero no es suficiente para reconstruir nuestro hogar», expresó Josefina con lágrimas en los ojos.

La familia Aguirre Guillén se encuentra en una situación desesperada, pues requieren una gran cantidad de materiales y fondos para iniciar la reconstrucción de su hogar. Hacen un llamado a la generosidad de los chihuahuenses y de aquellos que estén dispuestos a ayudar en momentos de adversidad.

«Lo necesitamos todo: bloques, láminas, yeso, cemento y, por supuesto, dinero para pagar a los trabajadores», enfatizó Josefina. «Hasta ahora, no hemos podido comenzar a reconstruir porque necesitamos un permiso del municipio, y ese proceso ha sido lento y burocrático».

La comunidad local se ha solidarizado con la familia, ofreciendo su apoyo y mano de obra, pero hasta que obtengan los permisos necesarios, no podrán dar inicio a la reconstrucción.

La dirección de su casa, donde alguna vez hubo risas y alegrías, ahora es un recordatorio sombrío de lo que perdieron. No obstante, mantienen la esperanza de que, con la ayuda de buenos samaritanos y la solidaridad de la comunidad, puedan reconstruir su hogar y recuperar la estabilidad que tanto anhelan.

Los interesados en brindar su ayuda pueden comunicarse al número de teléfono: 614-(690)- 64-92 o al 614-1- 40-59-67

si gusta donar al numero de cuenta: BBVA 151 455 11 76 y la cuenta clave 0 1 21 50
0 1 51 45 51 17 69 esta a nombre de miguel Ignacio Arellano.

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