Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce

En el Centro Histórico de Chihuahua, la realidad de algunas madres contrasta con la celebración del Día de las Madres. A un costado de la imponente Catedral, una madre rarámuri solicita con humildad algunas monedas para alimentar a sus hijos, sin expectativas de recibir un regalo en esta fecha especial.

Esta escena es un reflejo de la situación que enfrentan no solo las madres indígenas desplazadas de sus comunidades de origen, sino también aquellas abandonadas por sus propios hijos, quienes se encuentran en condiciones de vulnerabilidad.

Mientras que muchas familias se preparan para celebrar a las madres con detalles y obsequios, estas mujeres luchan diariamente por llevar un plato de comida a sus hijos, sin tener la certeza de contar con un techo seguro o una fuente de ingresos estable.