Nota y fotos por: Silver Juárez Arce

El centro histórico de Chihuahua, conocido por su riqueza arquitectónica y cultural, enfrenta desafíos significativos debido a la presencia de más de 30 edificios en desuso. Esta situación, resultado de las regulaciones de preservación y la falta de actividad económica, ha llevado a un estado de abandono que afecta a múltiples estructuras a lo largo de todo el centro.

El centro histórico ya no sería un lugar abandonado lleno de edificios deteriorados y cayéndose a pedazos por la imposibilidad de darles mantenimiento debido a las multas del INAH. La falta de mantenimiento y las restricciones para remodelar o rentar estos inmuebles han contribuido a un panorama desolador, donde edificios que alguna vez fueron pilares de la actividad local ahora se encuentran en un estado de abandono.

Entre los edificios emblemáticos que reflejan esta problemática se encuentran el Hotel Palacio del Sol, cerrado desde 2019, es uno de los ejemplos más notables. Con vidrios quebrados y plafones cayéndose por la falta de mantenimiento, el edificio se encuentra en un estado de total abandono. Aunque se han mencionado planes potenciales para convertirlo en consultorios médicos, nada ha sido confirmado hasta la fecha.

El mirador de las Fuentes Danzarinas, aunque no es histórico, se perfila a ser un símbolo del abandono debido a su prolongado cierre. En lugar de ser utilizado para actividades que beneficien a la comunidad, la estructura de metal se oxida y deteriora por la falta de mantenimiento. Este espacio, que podría ser un punto de encuentro y disfrute o alguna oficina, refleja la necesidad de intervención para evitar su deterioro y mejorar su uso, las casas de adobe en la calle General Trías y Neri Santos justo abajo de las fuentes danzarinas donde el deterioro se vuelve peligroso para los transeúntes.

Ante esta situación, el alcalde Marco Bonilla, en colaboración con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), ha anunciado un plan para realizar un inventario de los edificios históricos del centro de Chihuahua. Este inventario, programado para agosto de 2025, busca clarificar qué edificios pueden ser desarrollados y cuáles deben ser preservados, con el objetivo de encontrar un equilibrio entre la conservación del patrimonio cultural y la necesidad de reactivar la economía local.

Aunque aún no se han publicado resultados definitivos, este esfuerzo representa un paso crucial para resolver los conflictos entre los criterios de desarrollo urbano y las regulaciones de preservación histórica. Además, se han implementado otras iniciativas para atraer visitantes, como la instalación de tótems turísticos y el reconocimiento del centro como “Barrio Mágico”, que buscan destacar la riqueza cultural de la zona y fomentar el turismo.

La revitalización del centro histórico de Chihuahua no solo es una cuestión de preservar el patrimonio, sino también de impulsar la economía local y mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Con una planificación cuidadosa y una colaboración efectiva entre autoridades, inversionistas y la comunidad, el centro de Chihuahua podría recuperar su esplendor y convertirse nuevamente en un motor económico y cultural para la ciudad.