Planificar el último adiós: rompiendo el tabú de los servicios funerarios en Chihuahua
Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
En una sociedad donde la muerte suele ser un tema evitado, Gabriela Domínguez, asesora familiar de una empresa funeraria local en Chihuahua, enfatiza la importancia de planificar con anticipación un servicio que, aunque incómodo, es inevitable. “Muchos creen que al contratar un paquete funerario están atrayendo la muerte, pero es todo lo contrario: es un acto de amor y protección para quienes quedan”, afirma durante una entrevista en el centro de la ciudad.
En Chihuahua, donde la cultura de la previsión suele chocar con creencias arraigadas, Domínguez explica que adquirir un servicio funerario no solo evita cargas económicas y emocionales a los seres queridos, sino que garantiza dignidad en un momento de vulnerabilidad. “Nadie está exento, sin importar la edad. Lo inesperado puede ocurrir, y dejar todo resuelto es una forma de cuidar a nuestra familia”, agrega.
Actualmente, un paquete completo que incluye traslado del cuerpo, arreglo estético, velación en una capilla, apoyo legal y acompañamiento al panteón o cremación puede costar desde 66,000 pesos, con opción a pagos mensuales de 1,400 pesos. La cremación, por su parte, ronda los 50,000 pesos, aunque Domínguez aclara que contratar un servicio integral suele ser más conveniente. “En el momento de una emergencia, los costos se duplican. Planificar hoy ahorra hasta el 50%”, detalla.
A pesar de los beneficios, el tema sigue siendo un tabú. “La gente asocia la muerte con el miedo, no con la tranquilidad”, comenta la asesora, quien invita a reflexionar sobre la importancia de normalizar estas conversaciones. Entre los servicios destacados está la figura de un “guía familiar”, profesional que acompaña en cada paso del proceso, desde los trámites legales hasta el apoyo emocional.
Para quienes deseen informarse, Domínguez comparte el número 614-495-8530, reiterando que prevenir no solo es un acto de responsabilidad, sino una herencia de paz. “No se trata de acelerar lo inevitable, sino de aligerar el peso para quienes más queremos”, concluye.
En un estado donde la vida se vive con intensidad bajo el sol del desierto, hablar de la muerte sigue siendo un reto. Sin embargo, iniciativas como esta buscan transformar el miedo en preparación, recordando que, al final, todo se reduce a cuidar incluso lo que queda después.
