Nota y Fotos por: Silver Juárez Arce
Los ciudadanos que transitan a diario por las calles céntricas de la capital se enfrentan a un grave problema de obstrucción vial debido a la falta de vigilancia y aplicación del reglamento por parte de los agentes de tránsito.
Un claro ejemplo es la calle 27 y media entre Niños Héroes y Ejército Mexicano, donde un taller mecánico se ha apropiado del primero y segundo carril de la vía para realizar sus labores de reparación vehicular. Esta situación genera constantes embotellamientos, ya que es una arteria muy transitada que conduce hacia las oficinas de pensiones civiles del Estado.
«No hay ley, nunca se ven los tránsitos en esta zona,» se quejó un ciudadano al ver cómo un negocio particular obstruye dos carriles completos en pleno centro de la ciudad.
Son ya muchas las quejas reportadas por los automovilistas, pero al parecer no le interesa al director de Vialidad y Tránsito, César Komaba. Lamentablemente, esta no es una situación aislada, pues en diversos puntos los comercios e incluso particulares hacen caso omiso de las leyes de tránsito ante la nula supervisión de las autoridades competentes.
