Reportero de Policiacas
Las tres agentes de la Policía Municipal que se tomaron una fotografía con el cantante de narcocorridos, Natanael Cano, el pasado mes de septiembre, han declarado que nunca tuvieron la intención de dañar la imagen de la seguridad pública. Las agentes, que no son oficiales, han compartido su perspectiva sobre el incidente que ha causado polémica y consecuencias económicas.
En una conversación con elementos policiales, las mujeres explicaron que en ningún momento buscaron menoscabar la reputación de la Dirección de Seguridad Pública Municipal. Más bien, afirmaron que llevan su uniforme con respeto y orgullo, y que su objetivo era capturar un momento especial durante el evento del cantante.
Sin embargo, la repercusión de la imagen ha tenido un impacto negativo en sus vidas. Las agentes son madres solteras que dependen en gran medida de los ingresos adicionales que obtenían de las llamadas «extras». Estos turnos extra les permitían asistir a eventos fuera de su horario de trabajo, como bodas, quinceañeras y otras celebraciones, donde prestaban servicios de seguridad para ganar un dinero extra para sus familias. Lamentablemente, tras la controversia desatada por la fotografía, se les han cancelado estas oportunidades de trabajo adicional.
Las agentes subrayaron que la falta de estos ingresos adicionales ha afectado seriamente su situación económica y su capacidad para mantener a sus hijos. A pesar de las dificultades, continúan defendiendo su inocencia y asegurando que la toma de la fotografía fue un gesto amigable, impulsado por el propio cantante.
Cabe destacar que la imagen nunca fue compartida en las redes sociales por parte de las agentes; fue filtrada por otro miembro de la corporación policial. Este incidente ha generado controversia y ha tenido un impacto negativo en las vidas de estas agentes, quienes insisten en que su única intención era disfrutar de un momento con el artista y que en ningún momento buscaban desacreditar a la Policía Municipal.