Chihuahua, Chih. — En una conferencia de prensa cargada de declaraciones punzantes y guiños estratégicos, la presidenta nacional de Morena, Luisa María Alcalde Luján, descartó promover el desafuero del dirigente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno. “No se requiere ni un juicio de desafuero; ellos se ponen en evidencia y los castigará el pueblo”, afirmó la morenista ante medios locales.

La declaración se dio en el contexto del altercado ocurrido el pasado 25 de agosto en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, donde el senador Gerardo Fernández Noroña fue agredido por Moreno Cárdenas. El incidente, que encendió las tensiones entre oficialismo y oposición, fue calificado por Alcalde como una muestra clara del desgaste del bloque opositor.

“Muestra de cuerpo entero quién es el PRIAN: autoritarios, violentos, corruptos”, sentenció.

Más allá del episodio, la dirigente morenista aprovechó para desestimar cualquier iniciativa de desafuero, señalando que esa decisión corresponde exclusivamente al Congreso de la Unión. Sin embargo, no perdió oportunidad para ironizar sobre la estrategia de victimización que, según ella, emplean figuras como Lilly Téllez y el propio “Alito”. “¡No! Me quitaron el fuero, ¡me quieren desaforar porque soy oposición!”, dijo imitando el tono de los opositores.

Alcalde fue más allá: celebró abiertamente que Moreno continúe al frente del PRI. “Nos ayuda mucho ‘Alito’. Cuando se reeligió —creo que ya para toda la vida— yo estaba feliz de la vida, dije: ‘Qué buena onda’”, comentó entre risas. Para la líder de Morena, la permanencia del priista representa una ventaja estratégica, pues su figura contribuye al deterioro de la imagen del tricolor.

Encuestas recientes parecen respaldar esa lectura. Morena mantiene una ventaja significativa en intención de voto frente a los partidos opositores, mientras que el PRI y el PAN registran niveles de apoyo cada vez más bajos. Alcalde atribuye este fenómeno a la falta de propuestas del bloque opositor: “A eso se han dedicado, a atacar a la Presidenta desde redes sociales y conferencias de prensa. No tienen proyecto”, reiteró.

En resumen: No habrá desafuero, pero sí espectáculo. “Alito” se queda con fuero, con micrófono y con el aplauso involuntario de Morena. Porque en esta tragicomedia política, el villano ya no necesita castigo… basta con dejarlo actuar.

El pueblo, según Alcalde, ya tomó nota. Y si no lo ha hecho, seguro lo hará cuando “Alito” vuelva a pedir reelección vitalicia, esta vez con uniforme de mártir.