La gobernadora de Morelos, Margarita González Saravia, ha declarado que la Fiscalía General del Estado (FGE) reactivará denuncias por corrupción contra su predecesor, Cuauhtémoc Blanco. Negó proteger a Blanco y afirmó que el exfiscal Uriel Carmona solicitó el desafuero de Blanco en un intento desesperado por salvar su puesto, ya que sabía que iba a ser destituido. El Congreso de Morelos aprobó la destitución de Carmona horas después de su solicitud de desafuero contra Blanco por intento de violación.

En una conferencia de prensa, González Saravia explicó que Carmona lanzó la petición de desafuero cuando supo que el Congreso sería mayoritariamente morenista. Dijo que Carmona utilizó esta denuncia desde 2023 como herramienta de chantaje. La gobernadora también señaló que Carmona dejó pendientes varias investigaciones de feminicidios y enfrenta procesos judiciales que le impedían ser fiscal.

Además, González Saravia anunció que el Gobierno del Estado prepara un segundo paquete de denuncias por irregularidades en la administración de Blanco, que serán presentadas al Fiscal Anticorrupción. La presidenta Claudia Sheinbaum también acusó al exfiscal de haber cometido injusticias, recordando el caso de la muerte de Ariadna López, que Carmona se negó a clasificar como feminicidio, a pesar de las evidencias aportadas por la Fiscalía de la Ciudad de México en noviembre de 2022.

González Saravia concluyó que el seguimiento de las denuncias corresponde a la Fiscalía y que el Gobierno del Estado está comprometido a llevar adelante estas investigaciones para garantizar la justicia en Morelos.

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